En Extremadura siguen funcionando las traviesas de madera del siglo XIX.
En concreto, la que se fabricó en el año 1886 que pertenece a la línea ferroviaria Ciudad Real-Badajoz y que fue construida en 1880 por el servicio de infraestructuras MZA.
Está ubicada en el tramo entre Castuera y Cabeza del Buey (Badajoz), en concreto en el punto kilométrico 88,4 correspondiente al puente de la Ribera de Usagre. No es una anécdota. El 15% del total de la vía férrea por esta comunidad autónoma (725 kilómetros) son también así.
Se trata de una única vía, un solo carril de ancho convencional, sin tener ningún kilómetro electrificado, por lo que si se produce una incidencia en cualquier tren entonces queda alterada toda la planificación diaria, con retrasos habituales, casi diarios. Es la red ferroviaria más obsoleta del país, el tren de la vergüenza.